<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d11363529\x26blogName\x3dEl+Weenie\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://weenie77.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://weenie77.blogspot.com/\x26vt\x3d-8639029271648590326', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>
en isoHunt

17 diciembre 2006

Go with the flow

He pasado por tantos estados de ánimo en los últimos siete días, que ya no sé ni qué decir. Sólo tengo una cosa un poco más clara que las demás: aunque sé que siempre he sido un poco idiota, no ando muy lejos de ser, una vez más, un idiota enamorado.


El puente se presentaba muy bien después de la cena, me encontraba muy animado y no era para menos. Me sorprendió gratamente que Arlén se acordara de mí la semana anterior. Antes de irse a Kosovo quería despedirse de sus amigos de Valencia y yo no esperaba, sinceramente, ser uno de ellos. Así que hablé con ella y con Sandra, y el sábado cené con ambas y con el resto de sus amigos, que, aunque en menor medida, también son un poco los míos, y luego salimos de fiesta. Me lo estaba pasando muy bien, pero la idea era no recogerme muy tarde para poder ir al día siguiente al chalet de MejorAmigaDeObsesión a comer. Quién me iba a decir que volvería a casa más de 24 horas después de salir de ella.

Por la noche, ya en la cena, me llamó ObsesiónReciente (cuyo pseudónimo ya no hace justicia a la realidad) tres veces. ¿Por qué no me iba ya esa noche, y así no teníamos (ninguno) que madrugar el domingo? Vestido para salir de fiesta, sin ropa para pasar la noche y sin poder ir a casa a por el lambrusco que pensaba llevarme para comer, accedí. No les costó mucho convencerme.

Cuando llegué allí había ya dos amigos de ellas y en total éramos seis, que no es lo mismo que 3x2 por mucho que las matemáticas se empeñen en decir lo contrario. Aprendí un par de cosas esa noche sobre mí mismo. Una, que al parecer tengo un puntito. De atractivo, de morbo, de algo poco definible pero positivo al fin y al cabo. Más que positivo: el puntito cuando no había demasiada confianza acabó revelándose en un puntazo. Y aunque esto sea muy subjetivo, lo importante es que una de las que así opinó, ella, se reveló en la auténtica protagonista de esta semana (y lo que me queda), y que con la broma del puntito pasó lo que tuvo que pasar.

Recuerdo pasar horas, literalmente, hablando con ella en el coche por la noche, más que nada para alejarnos de un amigo suyo a quien intentaba evitar, y porque en la calle hacía mucho frío. Recuerdo que me contó prácticamente toda su vida amorosa, y yo a ella la mía. Debía parecer evidente, no sé el qué, pero algo había, y juro que ni se me pasaba, todavía, nada de eso por la cabeza. Las otras bromearon con dejarnos a solas, incluso al día siguiente se preguntaban si (con ese lenguaje tan juvenil que aún me descoloca un poco) nos habíamos enrollado. Recuerdo que dormí apenas dos horas, y sólo en parte por el frío. Recuerdo escribir un sms envuelto en mantas, primero en la cama y en el sofá después tras descartar toda posibilidad de seguir durmiendo, esperando que el resto se levantara, y guardarlo para enviárselo a ella más tarde. Recuerdo, ya sí, verla recién levantada y sentarse a mi lado, y no poder evitar mirarla con media sonrisa en la cara. Pero ni aún entonces yo sabía lo que se me pasaba por la cabeza.

El domingo la paella fue un desastre. El aceite salió en llamas y no pasamos del sofrito. A las cuatro de la tarde de un domingo de puente tuvimos que buscar por los pueblos cercanos lo que pudimos para comer, finalmente, pasadas las cinco. El ambiente estaba enrarecido entre ella y su amigo, y por cercanía nos afectaba a todos. Yo, que también estaba de bajoncillo por otros motivos, no sé cómo ni de dónde saqué fuerzas para animar la conversación durante la comida. Y fue entonces cuando la suerte, por una vez en la vida, se puso de mi lado.

Dos coches para volver a Valencia, seis personas y varias maletas. ObsesiónPasada (ya va siendo hora de adaptar los pseudónimos a la realidad) quería que fuéramos a tomar algo al llegar, se resistía a dar por terminado el puente. Yo ya avisé nada más levantarnos que no me apetecía, puesto que seguía con la misma ropa del sábado por la noche, y había dormido mal, por no decir nada (y por no hablar de mi estado de ánimo). Ella, mi ella, MiPrima a falta de una palabra mejor, tenía dolor de cabeza y tampoco estaba para muchas fiestas. Solución (no sugerida por ninguno de los dos): que se viniera conmigo y la llevara yo a casa. Tampoco aquí tuvieron que esforzarse por convencerme.

Y de vuelta a casa, ya de noche, los dos solos, en una carretera que no conocía y en medio de un atasco para entrar en Valencia, dejé de ser yo. Seguro de mí mismo, según iba hablando fui tomando conciencia de lo que los demás, al parecer, ya sabían: que me gustaba aquella chica. Y MiPrima, si todavía no lo sabía, salió de dudas rápidamente. Me seguía las bromas (incluso las subidas de tono), insistió en que le enseñara aquel mensaje en lugar de mandárselo luego, y con el tonteo del mensaje, el puntito, y el puntazo, empezó todo. El mensaje, madurado por mí durante todo el día, y que ya de por sí era toda una declaración de intenciones, dio pie a todo lo demás, pero no fue antes de empezar a hablar que me di cuenta de lo que iba diciendo y hacia dónde iba la conversación. Y lo mejor de todo es que ella me seguía.

Llegamos a su casa, le ayudé a subir la maleta y los que acabamos tomando algo en Valencia, a solas, fuimos nosotros. Me sentía como un quinceañero. Hacíamos manitas y me daba igual todo. No existía el mundo alrededor de esa chica que tenía enfrente. Me estaba tirando de cabeza a una piscina que apenas 24 horas antes ni siquiera sabía que estaba allí, y para sorpresa mía no me había roto la crisma. Mi media sonrisa al mirarla era ya más que eso, y ella se sonrojaba continuamente con mis palabras. Salimos de allí caminando abrazados, y yo no podía ser más feliz.


Todo esto tiene un pero, desde luego. Ella seguía enamorada de su ex, a quien intentaba recuperar, aunque él tiene pareja. Pero digo seguía y estaba porque a día de hoy ya no creo que sea así, por lo que ella me ha contado. Han pasado tantas cosas esta semana... Supongo que la fase del tonteo me la salté directamente y en ese día en su chalet pasé directamente a la siguiente, que debe ser de conquista porque aunque ella está receptiva hay algo que la frena, y no sé si es algo que ve en mí o es el recuerdo de su ex. Sea como sea, de no ser por sus amigas, en concreto por BenjaminaDeClase, a media semana yo ya habría tirado la toalla. Tuve uno de esos bajones míos cuando me autoconvencí de que ella no es para mí.

Pero el viernes volvió a cambiar todo para bien, que para eso están las amigas, y cuando las de ella están de tu parte y de que entre ambos surja algo, no es tan fácil perder la esperanza. Y ella tampoco me ha dejado perderla, todo sea dicho. Ahora mismo tengo motivos para ser muy optimista y también muy pesimista, así que no voy a pensar en ello. Sólo sé que con MiPrima, al menos, no me voy a echar atrás. No sé a dónde llegaré, pero me dejaré llevar por la corriente.


Actualmente escucho: "Go with the flow" (Queens of the Stone Age)



She said 'I'll throw myself away,
they're just photos after all'
I can't make you hang around.
I can't wash you off my skin.
Outside the frame, is what we're leaving out.
You won't remember anyway.

I can go with the flow
but don't say it doesn't matter anymore
I can go with the flow.
Do you believe it in your head?

It's so safe to play along,
little soldiers in a row.
Falling in and out of love
with something sweet to throw away.
But I want something good to die for
to make it beautiful to live.
I want a new mistake, lose is more than hesitate.
Do you believe it in your head?

Anonymous Anónimo said...

aaaaaaaaa!!! felicidades!!! ves? como siempre llegan las cossas!!!!!
Y lo del pesimismo cometelo con patatas anda! que ahora solo hay hueco para el optimismo!!!

un besote gordo!!!

9:17 a. m., diciembre 18, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Joeeeee como me alegro!!! de veras te lo mereces, ais que bonito es el amol... y como ya te han dicho, se optimista!!

Un besitoo :**

9:37 a. m., diciembre 18, 2006  
Anonymous Anónimo said...

1. de siete letras:
-En los instrumentos de cuerda que tienen puente, como el violín, el contrabajo, etc., palo que se pone entre sus dos tapas para que se mantengan a igual distancia.
-Sal del ácido silícico.
2. de seis letras:
-Donde repartiría charlas y sonrisas Giovanni Guareschi.

Discreto juego de los detectives. ;)
Y ya que yo te contaré simple y compuesto, justo es que me cuentes tu nuevo recuento de mariposas.

Un beso.

11:14 a. m., diciembre 18, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Si es que te lo mereces tio.. me alegro un montón por tí.

No solo por esto, que no sabes qué puede pasar, sinó porque te has abierto, has tumbado una de tus barreras y superado uno de tus miedos. Te has abierto unos nuevos caminos, da igual donde terminen porque sabes que puedes andarlos.

Un abrazote, mas FENOMEN que nunca ;)

12:52 p. m., diciembre 18, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Me encanta esa cancion...
Felicidades por lo tuyo :), me alegro de que estes asi de contento, espero que te dure esa sensacion.

12:03 a. m., diciembre 19, 2006  
Anonymous Anónimo said...

Mi querido Joe:
Jejejejejeje. Aunque la primera parte es cierta (la palabra), no es del todo correcta.
Hoy te daré nuevas pistas: unas para enmarcar, otras para concretar.
Complementa a la primera:
a. Stop!
b. Sistema métrico decimal.
c. Los sábados por la tarde no fueron lo mismo sin él.
(mas fácil imposible)

2. de seis letras:
-Donde repartiría charlas y sonrisas Giovanni Guareschi.
-Franquicia de doña Rosa.
-Sus frutos comieron las cabras y se pusieron como cabras.

3.6-2-7:
-El primer cortejo data del 24 de agosto de 1723.

Mas fácil imposible. Si me haces bajar mas el nivel pasaré al morse. :)
Aunque tambien te puedes desquitar haciendo lo mismo conmigo: me gusta la geodesia y los crucigramas. (Juas)

Un beso y feliz pesquisa.

8:39 a. m., diciembre 19, 2006  
Blogger Mari Carmen said...

A ver, deja el pesimismo en un cajón! Y tirate a la piscina, q según cuentas, seguro q todo sale bien! A por ella!
Besotes
P.D.: Aunque no comente, si q me sigo pasando por aquí... Pero hay veces q no se me ocurre q decir.

9:58 a. m., diciembre 19, 2006  
Blogger Patri* said...

*....I want a new mistake*


bonita cancion :)!


siglos sin pasaaaaaaaaarme!ando perdidisima!!!!


SALUDOOOOS!

4:53 p. m., diciembre 19, 2006  
Blogger Vir said...

Suerte con ella!!! me alegro un monton!!! :)

1:38 a. m., diciembre 20, 2006  

Publicar un comentario

<< Home