98% y subiendo

Esta mañana me he despertado con una sensación muy agradable.

Han sido quinientos diecisiete días, que se escribe pronto y se dice más pronto aún, con la rutina diaria, muy a mi pesar, alterada. Una de las cosas que más ganas tenía de hacer, cuando acabara todo, era dormir a piernas sueltas. Sí, las tres.

Ayer me dieron el alta definitiva en el hospital. Me han dicho que no quieren volver a ver mi culo nunca más, y no les culpo. Ciertamente tengo un culito muy mono (afirmación sobre la cual no pienso aportar pruebas gráficas), pero hasta yo me canso de verlo todos los días buscando restos de sangre. Pienso guardar el espejito de marras bien lejos.

Así que anoche ya pude dormir sin dodotis. No más gasas para evitar manchas de sangre, y no más gallumbos ajustaos como medida extra de sujección. Por fin ha podido dormir sin estrecheces mi Little Joey.

Bienvenidas de nuevo las tiendas de campaña mañaneras. Y que viva el mooning.

Actualmente escucho: Los Petersellers